jueves, 5 de febrero de 2009

Para una poesía contra el abuso sexual infantil












LOS ULTRAJADOS

Los ultrajados se pasean por el balcón
y desde la parte superior
le hacen señas a los niños de la plaza
éstos no conocen la luz del sol
una malla atraviesa las cortinas
y detiene el vuelo de las mariposas
alguien parece venir
se miran mutuamente
el silencio se detiene
y comienzan los gritos
es la rutina de todos los días
dura tan sólo unas agudas lágrimas
el abusador desgarra los vestidos
y la inocencia de la pequeña Blanca,
mientras Erasmo presencia
la fatal desfloración
de repente
la puerta se cierra
retorna el silencio
se detiene el vuelo de una mariposa
en la malla del ventanal
y reincorporándose
hacen señas
desde la parte superior
a unos niños que jamás jugarán con ellos.

Combate la pornografía infantil
http://www.pedofilia-no.org/

2 comentarios:

  1. Me ha gustado mucho este poema. Lo he pegado en un post para recordar, hoy 20 de Noviembre, Día de los Derechos del NIño, aquello con lo que debemos ser especialmente sensible.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  2. La verdad son muchos los temas sobre los cuales los escritores no se atreven a hablar. Hace tiempo que la poesía dejó de ser ese vehículo de denuncia de las injusticias y aberraciones sociales.

    ResponderEliminar